La cuenta de Llaver, en la mira de los investigadores.
Los detectives analizaron el perfil Leandro Llaver en esa red social y descubrieron que se seguían mutuamente con la denunciante, de 12 años. Creen que también hubo contactos con la hermana de la niña, que fue víctima un caso similar.
El perfil de Instagram de Leandro Llaver Adaro (32), el auxiliar fiscal detenido el sábado por el presunto abuso sexual a una niña de 12 años en San Martín, podría convertirse en una de las claves para los detectives que trabajan el caso.
Mediante un análisis se detectó que el acusado y la denunciante se seguían mutuamente. Esto confirma parte de la versión de la menor, que le había relatado a las autoridades que pactaron encontrarse a través de las redes sociales.
Al profundizar sobre la actividad en la cuenta de Llaver, los pesquisas también descubrieron que el empleado judicial tenía entre su lista de seguidores a una hermana de la niña, que tiene 15 años y fue víctima de una vejación en 2018.
Por ese caso también fue detenido un funcionario del Ministerio Público, quien terminó condenado a 5 años de prisión.
Esas coincidencias no dejan de sorprender a los investigadores, por lo que se analizará si también existió algún tipo de contacto con la otra menor. Incluso, la chica le puso me gusta a dos fotos en las que el imputado aparece junto a su padre, el precandidato a diputado provincial por Cambia Mendoza y presidente del Honorable Concejo Deliberante de San Martín, Daniel Llaver.
Justamente, una de esas fotos, tomada semanas atrás, se viralizó el domingo entre usuarios de la Zona Este, después de que el dirigente radical aseguró a través de su Facebook que no tenía “ningún tipo de relación” con su hijo.
Así las cosas, mientras el caso que reveló el domingo El Sol continúa sacudiendo a las esferas judiciales y políticas del departamento, Llaver sigue alojado en la Comisaría 12ª, a la espera de que el fiscal Germán Hnatow defina su situación de encierro.
El sábado, el representante del Ministerio Público lo imputó por el delito de abuso sexual agravado por el acceso carnal.
El caso
Todo comenzó alrededor de las 11 de la mañana del sábado cuando una niña pidió ayuda en la vía pública a una vecina, en las cercanías de la Unidad Fiscal San Martín-La Colonia. Una mujer la asistió y la trasladó hasta ese edificio judicial.
Allí, la menor les relató a las autoridades que había sido víctima de un abuso sexual y que hacía minutos había logrado escapar de la casa del presunto autor. Según su versión, había intentado salir de allí horas antes, pero el sospechoso no se lo permitió.
Cuando los pesquisas identificaron a la niña, constataron que su madre había radicado una denuncia de paradero durante la madrugada, debido a que había salido de su domicilio y jamás regresó.
Momentos más tarde, con la presencia de la progenitora, se radicó la denuncia correspondiente por la vejación y se individualizó al presunto abusador, quien resultó ser Llaver, un auxiliar fiscal de esa jurisdicción.
De la presentación judicial surgió que la niña se encontró con Llaver en las cercanías del aeroclub San Martín y luego se dirigieron a Palmira a tomar unas cervezas. Finalmente, terminaron en el departamento del imputado, donde habrían mantenido relaciones sexuales, de acuerdo con la información policial.
Después de escuchar el relato de la menor, el fiscal Hnatow ordenó realizar un allanamiento en la vivienda del sospechoso, ubicada a pocas cuadras de la Unidad Fiscal. En ese lugar fue detenido y se incautaron elementos de importancia para la instrucción.
En tanto, a la niña se realizaron los estudios médicos correspondientes y se descubrió que tenía heridas en los genitales, que son coincidentes con abusos sexuales de vieja data. Se espera que durante la semana declare en cámara Gesell.