
Son horas de máxima angustia en el departamento de La Paz. Una alumna de tan solo 14 años desató el pánico total en la escuela Marcelino Blanco, a la que asiste, tras ingresar con un arma de fuego, efectuar al menos tres disparos al aire y atrincherarse dentro del establecimiento. La situación, que sigue en pleno desarrollo, mantiene en vilo a toda la comunidad.
El colegio se encuentra completamente sitiado por fuerzas de seguridad, mientras un comité de crisis intenta desesperadamente resolver la situación. La gravedad del hecho obligó a las autoridades a desplegar el helicóptero policial para trasladar de urgencia a un equipo de elite del Grupo de Resolución de Incidentes y Secuestros (GRIS), quienes ya se encuentran en el lugar intentando establecer un diálogo con la adolescente.
Mientras tanto, el resto de los alumnos fueron evacuados en medio de escenas de caos y desesperación. En un comunicado conjunto, los ministerios de Seguridad, Salud y Educación rogaron a la ciudadanía que no se acerque a la zona, admitiendo que «cualquier alteración externa… podría tener consecuencias graves», lo que evidencia la fragilidad del operativo.
En medio de la tensión, una versión extraoficial sacude aún más el caso: la niña que protagoniza el incidente sería hija de un efectivo de la policía de la provincia de San Luis. Este dato, que aún no ha sido confirmado oficialmente, añade una capa de complejidad y misterio a un hecho que ya ha conmocionado a toda la provincia. La Paz contiene la respiración mientras los negociadores trabajan contrarreloj.