El país llegó a este número aterrador 498 días después del primer contagio. Casi la mitad de los fallecidos se registró en los últimos cien días. Los casos positivos están bajando, los números aún son preocupantes. El 60% de los mayores de 20 años están vacunados con al menos una dosis. Y están intentando demorar el ingreso de la variante más trasmisible registrada hasta el momento.
Al menos 43.163 personas murieron en la primera ola, que tuvo su pico en octubre de 2020 con unos 13.416 casos confirmados y 453 muertos por día. Aquello, ya gravísimo, fue leve en comparación con lo que vendría después.
Entre el 20 de diciembre y el 10 de enero, por las fiestas de fin de año, hubo una nueva suba. Luego la curva fue a la baja y a fines de marzo –con la Semana Santa de por medio- la situación volvió a complicarse: desde abril se contabilizaron el 45% de los muertos y el 50% de los casos de toda la pandemia.
Ahora, la situación es menos peor. En el pico de la segunda ola, en mayo, hubo 31.901 casos promedio por día y 452 muertes. Y en la primera semana completa de julio hubo 14.803 casos diarios y 371 fallecimientos informados.