Cerrado por reformas: el bodegón que vendía carne de Capibara ahora disimula el escándalo”

El restaurante Viejo Mundo Bodegón, ubicado en el barrio porteño de La Paternal, intentó justificar esta semana su clausura por vender carne de especies exóticas con una insólita excusa: ahora aseguran que el cierre se debe a “reformas”.

El local, conocido por ofrecer platos fuera de toda norma, fue inspeccionado por la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), que secuestró 365 kilos de carne de carpincho, yacaré, rana, ciervo, jabalí y perdiz, todos productos sin habilitación, sin documentación que acreditara su origen y en condiciones no aptas para consumo humano.

Mientras la Justicia avanza en la causa por violar el artículo 86 del Código Contravencional porteño, la versión del bodegón en sus redes sociales es muy distinta: “Desde hoy jueves 3 de julio cerramos nuestras puertas por un tiempito. Nos tomamos unos días para hacer reformas y dejar todo más lindo para ustedes”, publicaron, acompañando el mensaje con fotos del salón y carteles de “cerrado por reformas”.

El operativo, encabezado por el fiscal Blas Matías Michienzi, involucró a agentes del Cuerpo de Investigaciones Judiciales, Policía Federal y organismos de control del Gobierno de la Ciudad, quienes constataron que el encargado tampoco figuraba inscripto en el Registro Público Único de Operadores de Fauna Silvestre ni en SENASA.

A pesar del revuelo, los responsables del Viejo Mundo Bodegón insisten: “Pronto volvemos con más sabor, más calidez y muchas ganas de recibirlos como se merecen”. Habrá que ver si los comensales siguen con ganas de “degustar” carne de carpincho cuando reabran, si es que la Justicia lo permite.