Argentina se sumó a las Fuerzas Marítimas Combinadas comandadas por Estados Unidos. En Defensa dicen que “solo se trata de entrenar y conocer cómo se desarrollan las actividades de protección”.
El gobierno dio un paso más en el alineamiento automático con Estados Unidos e Israel y se sumó de manera formal a las Fuerzas Marítimas Combinadas. Se trata de una fuerza militar integrada por 46 países y está bajo las órdenes de un comandante de Estados Unidos y un vicecomandante de Reino Unido y que Argentina ingresó en septiembre.
El objetivo de esta fuerza es garantizar la circulación de algunas de las vías comerciales en Medio Oriente en un contexto de guerra total. Según pudo saber el diario, esta coalición militar no participa directamente de los conflictos armados pero tiene entre sus objetivos contrarrestar los ataques de la milicia hutí, un aliado proxy de Irán en Yemen que escaló sus agresiones desde el inicio de la ofensiva israelí contra el territorio palestino de la Franja de Gaza.
Cabe destacar las Fuerzas Marítimas Combinadas representa a la quinta flota de Estados Unidos en Bahrein, una monarquía petrolera del Golfo Pérsico. En Defensa aclaran que el rol de Argentina está vinculado con las directrices de política exterior que explicitó el propio Milei pero es un intercambio que ya realizan otro países.
De todas formas, la presencia en la zona pone al país en el riesgo de pelear directamente con fuerzas pro-iraníes en Yemen aunque en ese caso se necesita apoyo del Congreso.
Vamos a participar de la fuerza 150 de seguridad marítima. Tiene que ver con entrenar y conocer cómo se desarrollan las actividades de protección de líneas de comunicación naval
Fuentes de Defensa explicaron que “vamos a participar de la fuerza 150 de seguridad marítima. Tiene que ver con entrenar y conocer cómo se desarrollan las actividades de protección de líneas de comunicación naval”.
“En 2025 se prevé una participación de máximo dos hombres de la Armada. Un oficial y un suboficial para entender el entorno operativo”, afirman.
Sobre la posibilidad de un conflicto con Irán o sus proxy, esta fuente asegura que “no, porque la fuerza militar no está en contra de un X o de un Z sino que provee protección a las líneas de comunicación naval. El formato coalición de voluntad permitió establecer como y en qué forma participar de este tipo de iniciativas. Por ahora es ver y entender el entorno operacional”.
Sobre la posibilidad de un conflicto con Irán o sus proxy, esta fuente asegura que “no, porque la fuerza militar no está en contra de un X o de un Z sino que provee protección a las líneas de comunicación naval. El formato coalición de voluntad permitió establecer que como y en qué forma participar de este tipo de iniciativas
Con Argentina, ya son Colombia, Ecuador y Brasil los países de latinoamericanos que participaron de este espacio que también integra a Albania, Australia, Bahrein, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Djibouti, Egipto, Finlandia, Francia, Alemania, Grecia, India, Irak, Italia, Japón, Jordania, Kenia, República de Corea, Kuwait, Malasia, Países Bajos, Nueva Zelandia, Noruega, Omán, Pakistán, Filipinas, Polonia, Portugal, Qatar, Arabia Saudita, Islas Seychelles, Singapur, España, Sri Lanka, Suecia, Tailandia, Turquía, Emiratos Árabes Unidos, Reino Unido, Estados Unidos y Yemen.
Esto forma parte de lo que Milei anunció en las Naciones Unidas que Argentina abandonará la neutralidad en los conflictos que afectan a sus aliados, como el es el caso de Israel contra Hamas, Hezbolá e Irán.
El giro militar es notorio desde la llegada del gobierno libertario, ya que, como anticipó en exclusivo LPO, el gobierno ya hizo el pedido formal para formar parte de la OTAN en un claro alineamiento con Estados Unidos que también se expresa en designaciones locales como en el área de ciberdefensa, donde el ministerio de Petri nombró a un funcionario de la embajada.