
Mientras el Gobierno de Mendoza destina millones de pesos en pauta publicitaria para blindar su imagen, los trabajadores de la salud reciben aumentos que no alcanzan ni para cubrir la canasta básica. El último ejemplo: el decreto firmado por Alfredo Cornejo que otorga subas marginales a los licenciados en enfermería, quienes ya anticiparon que irán al paro por lo que consideran una propuesta irrisoria.
Mediante el Decreto 1612, publicado este jueves en el Boletín Oficial, el Ejecutivo provincial dispuso un incremento del 4% en julio, 3% en septiembre y 3% en noviembre. A esto se suma la eliminación de un adicional y una suba mínima en el suplemento por especialidad.
Desde el Gobierno argumentaron que se trata del “máximo esfuerzo” posible, en función de la recaudación y del objetivo de sostener el equilibrio fiscal. Sin embargo, los gremios no tardaron en responder. ATE calificó la propuesta como una burla y anunció medidas de fuerza. El gremio explicó que ese 4% significa apenas $5.300 para un trabajador clase 6 o 7 del Régimen 15, muy por debajo de los valores actuales de la canasta alimentaria.
Por otro lado, la otra entidad con representación en el sector, AMPROS, directamente no se presentó a la audiencia paritaria.
La indignación crece dentro del sector salud, donde ya nadie se explica cómo el Gobierno sostiene que no hay plata para mejores salarios, pero sí la hay para contratos publicitarios millonarios, actos oficiales fastuosos y blindaje mediático en medios amigos.
¿Cómo se compone el aumento para los licenciados en enfermería?
- Eliminación del Adicional 3422 (desde el 1º de julio) e incorporación al básico.
- Incremento del básico del 4% en julio, 3% en septiembre y 3% en noviembre.
- Suba del Suplemento por Especialidad Profesional Salud (Ítem 3216): del 80% al 84% en agosto, y del 84% al 88% en octubre.
Con este esquema, el Gobierno da por cerrada la negociación salarial para el sector en 2025. ATE, por su parte, adelantó asambleas con retención de servicio para el lunes 4 de agosto y un paro total de actividades el martes 5.
En una provincia donde la inflación no da tregua y los precios suben cada semana, las decisiones del Ejecutivo parecen cada vez más alejadas de las necesidades reales de quienes sostienen el sistema de salud público. Una vez más, los trabajadores reciben migajas mientras la pauta oficial se mantiene intocable.