
Un día de calor agobiante en el dique El Carrizal casi termina en la peor tragedia, pero la vocación y el rápido accionar de dos policías obraron el milagro. Un joven de 20 años, que ya había sido sacado inconsciente del agua, volvió a nacer gracias a las maniobras de RCP que los efectivos le practicaron en una lucha contrarreloj por su vida.
La pesadilla comenzó este sábado cerca de las 15, cuando el joven se arrojó al agua en la zona del paredón para refrescarse. Sin embargo, un cambio repentino en el viento le impidió regresar a la orilla. Agotado por el esfuerzo, comenzó a ahogarse y tuvo que ser rescatado por otras personas que se encontraban en el lugar.
Cuando una pareja de policías de la subcomisaría de la zona llegó tras un llamado al 911, el panorama era desolador: el muchacho yacía en la orilla, inconsciente y sin signos vitales aparentes.
Sin dudarlo un segundo, los efectivos iniciaron las maniobras de reanimación cardiopulmonar. Minutos después, con la colaboración de Bomberos, el esfuerzo dio sus frutos. En un momento de máxima tensión, el joven logró expulsar el agua de sus pulmones y recuperó el conocimiento, volviendo literalmente de la muerte.
La historia, que pudo ser una tragedia, se convirtió en el relato de un rescate heroico que resalta la importancia de la preparación y el coraje de las fuerzas de seguridad.