Tres de los cuatro rugbiers violentos que fueron acusados por la Justicia decidieron dar su versión en el expediente
Rugbiers violentos: Garrido, Muñoz, Bordignon y Biligier, los acusados por el hecho.
La investigación contra los rugbiers violentos acusados de participar de una golpiza a un menor de edad el domingo pasado en Chacras de Coria viene teniendo importantes avances en los últimos días. En la jornada de miércoles fueron imputados cuatro jóvenes que habrían tenido distinto grado de participación en la violenta secuencia y este viernes se supo que tres de ellos declararon en la causa.
La fiscal de Homicidios Claudia Ríos acusó por el delito de amenazas a Juan Martín Muñoz (20), Martín Bordignon (18), Luca Biglieri (18) y Luciano Nahuel Garrido (18). El último de ellos fue además formalizado por lesiones graves, ya que es sospechado como el autor del golpe que le causó 8 fracturas en el rostro al adolescente de 16 años.
En una conferencia de prensa que brindó este viernes, la magistrada detalló que tres de los acusados declararon en el expediente. Muñoz y Garrido aportaron la versión de que antes del ataque hubo una pelea anterior en la fiesta de cumpleaños que se realizaba en Chacras de Coria. En ese primer altercado, Muñoz habría recibido una golpe en la nariz y eso derivó en el segundo enfrentamiento. Incluso aportaron nombres de testigos que pueden ratificar esa versión.
Por su parte, Biglieri declaró que si bien estaba en el interior del vehículo con los sus compañeros del Liceo Rugby Club fueron a buscar a sus adversarios, se encontraba durmiendo y no participó ni de los golpes ni de las amenazas.
Los sospechosos pertenecen al Liceo Rugby Club.
Brutal golpiza
En la madrugada del domingo pasado se estaba realizando una fiesta de cumpleaños de 16 años en Chacras de Coria. Allí comenzó el incidente entre un grupo de rugbiers violentos y otros jóvenes menores de edad que terminó con graves lesiones a uno de ellos. Según reconstruyó la fiscal, estos últimos se retiraron del lugar caminando pero fueron perseguidos por los agresores que circulaban en un auto.
A pocas cuadras lograron darle alcance y comenzaron a amenazarlos con volver a golpearlos. Incluso intentaron subir por la fuerza a uno de los chicos al auto pero desistieron de hacerlo a los pocos segundos.
El menor agredido fue asistido por su padre quien fue a buscarlo y lo trasladó a la Clínica de Cuyo, donde la diagnosticaron ocho fracturas en el rostro. Si bien fue dado de alta en los últimos días, en las próximas semanas deberá ser intervenido quirúrgicamente.