Jugar en una plaza pública de Guaymallén se convirtió en una trampa mortal. Un nene de 8 años, Mateo, está internado en el Hospital Notti después de recibir una brutal descarga eléctrica al tocar un poste de luz en la plazoleta Pedro del Castillo. Mientras la familia denuncia un cable suelto producto de la negligencia, la Municipalidad intenta despegarse de la responsabilidad.
La pesadilla ocurrió este miércoles por la noche. Mateo jugaba bajo la atenta mirada de su padre cuando el horror se desató. «Vimos que tocó el poste y saltó cayendo de espalda al piso. Corrimos a auxiliarlo y estaba desmayado. Tenía sangre en el oído», relató su abuela Graciela, todavía en shock.
La respuesta de la Municipalidad de Guaymallén fue la de siempre: culpar al «vandalismo». En un comunicado, afirmaron que un poste «había sido vandalizado» y que, tras una revisión, «no había tensión» y todo funcionaba «correctamente». Una versión que choca de frente con la de la familia, que asegura que los propios técnicos que asistieron al lugar corroboraron la existencia de un cable suelto que provocó la descarga.
Mientras el municipio se lava las manos, un nene de 8 años yace en una cama de hospital por la negligencia de quienes debían garantizar su seguridad. La familia, abocada al cuidado de Mateo, ya adelantó que radicará la denuncia en la fiscalía, buscando justicia por un hecho que pudo haber terminado en una tragedia irreparable.