El lugar donde se realizó el hallazgo.
Los restos fueron encontrados por familiares de la víctima en las cercanías del Río Mendoza, en la zona de Barrancas. El principal sospechoso del crimen, Víctor Zalazar, se suicidó días antes.
El cadáver del carpintero Sergio Lobos fue hallado la tarde de este miércoles en Maipú. Fue durante rastrillajes que estaban realizando sus familiares.
Los restos se encontraban en las inmediaciones del Río Mendoza, en la zona limítrofe de los distritos de Barrancas y Fray Luis Beltrán, a unos ocho kilómetros del lugar donde se había concentrado la búsqueda policial.
Fueron los hijos de Lobos quienes identificaron el cuerpo, previo a la llegada de las autoridades policiales y judiciales.
Según indicaron fuentes consultadas, los restos se encontraban en un avanzado estado de descomposición.
Tras tomar conocimiento sobre la situación, se desplazó hasta el lugar personal de Científica, Investigaciones y el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello, para liderar las tareas.
El hallazgo se produjo cinco días después de que fue encontrado sin vida el principal sospechoso, Víctor Hugo Zalazar (37), quien se había quitado la vida ahorcándose en un descampado ubicado detrás del cementerio de Santa Blanca, en San Roque.
La hipótesis principal de los detectives sostiene que Zalazar mató a Lobos para robarle su camioneta y que luego se suicidó cuando el caso tomó relevancia mediática y se vio acorralado por la investigación.