Tras cuatro semanas de actividad moderada, una gran erupción irrumpió en el cráter sureste.
El volcán Etna, ubicado en la isla de Sicilia, al sur del Italia, entró en actividad este lunes cerca de la medianoche y dejó imponentes y espectaculares imágenes.
Según un comunicado a las 23:52 de la noche de ayer del Osservatorio Etneo, dependiente del organismo Istituto Nazionale di Geofisica e Vulcanologia, el Etna se vio afectado en la noche del 18 al 19 de enero por una “intensa actividad” producida por el cráter sureste y en ese momento se registraba una “débil fuente de lava que alcanzó su máxima intensidad sobre las 20:30”.
La nube de cenizas y gases que anticipaba la intensa actividad del volcán, incluso afectó la localidad cercana de Fleri. Luego de que la nube típica que acompaña la explosión apareciera, se observó que 2 ríos de lava descendían por la cara este y norte de la montaña.
A las 06:46 UTC, el Osservatorio confirmaba que la nube volcánica ya no estaba presente en la atmósfera y que los flujos de lava se encontraban ya en proceso de enfriamiento.