México: batalla campal entre barras dejó al menos 20 muertos (Videos)

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El partido entre Querétaro y Atlas fue suspendido por la extrema violencia en las tribunas. Por el momento no se reportó oficialmente ningún muerto, aunque versiones extraoficiales hablan de 17 fallecidos.

La barbarie en las canchas de fútbol volvió con todo. Fue en México, en el partido entre Querétaro y Atlas, en el que el visitante se imponía por 1-0 con un gol del argentino Julio Furch. De pronto, todo estremeció y el encuentro fue suspendido a los 17 minutos del segundo tiempo.

Las peleas dejaron cuerpos tendidos por varios rincones del estadio y el número de heridos asciende a 22. Por el momento no se reportó oficialmente ningún muerto debido a las peleas en el Estadio La Corregidora, aunque reportes extraoficiales hablan de 17 fallecidos.

La Coordinación de Protección Civil del Gobierno de Querétaro reportó por Twitter que, tras los desmanes en el estadio La Corregidora, “no se tiene reporte de personas fallecidas”, pero reveló que había “22 personas lesionadas, 9 de ellos trasladados al Hospital General y de estos, dos de gravedad”.

Las fuerzas de seguridad, según el periódico Récord, resultaron “desbordadas por los hechos y optaron por hacer saltar a los aficionados al campo de juego, a manera de protección”.

De esta manera, cientos de espectadores invadieron la cancha mientras se celebraba el cotejo, que ganaba el elenco de Guadalajara por 1-0.

Algunos hinchas que entraron al campo “siguieron con la violencia sobre el césped, buscando golpear a sus rivales”, según apuntó la publicación.

Incluso, un grupo de barras de Querétaro, conjunto que es conducido por otro argentino, Rolando Cristante, entró con navajas en mano “y procedió a llevarse las redes de ambos arcos, a manera de trofeo de guerra”.

Los jugadores abandonaron el terreno de juego y partieron a los vestuarios, donde se guarecieron. Durante la invasión de cancha, algunos aficionados se protegieron de los enfrentamientos de barras, pero otros destruyeron elementos, como la pantalla donde los árbitros observan las jugadas que les retransmiten desde las cabinas del VAR.

Llamativamente, varios de los involucrados en las peleas fueron desnudados por sus rivales. Además, claro, de ser pateados, apaleados y golpeados con objetos contundentes. Incluso ya vencidos, en el piso y sin reacción. Una saña máxima, descontrolada.