Cayeron en un allanamiento realizado en Luján de Cuyo y hasta el momento no fueron imputados.
La investigación por la salvaje golpiza que recibió Moisés Agustín Pérez Silva (30) tuvo un avance clave este viernes con la detención de cuatro personas que habrían participado en el hecho. La víctima fue agredida el lunes a la salida de una fiesta en Chacras de Coria, Luján de Cuyo.
Los detenidos son una mujer de 19 años y tres hombres, de 19, 20 y 28 años. Cayeron en un allanamiento realizado en el Barrio Jardín Brandsen de Luján de Cuyo y hasta el momento no fueron imputados, indicaron desde el Ministerio Público Fiscal.
A su vez, en la misma medida se secuestró un auto Volkswagen Vento, que había sido señalado por los testigos que prestaron declaración y que se encontraban en el lugar del hecho cuando sucedió.
Mientras Pérez Silva sigue recuperándose en una clínica privada de los golpes recibidos, los detectives del caso lograron identificar a parte de los supuestos agresores, que se presume eran una docena.
Una de las pruebas claves fue el video que se publico, registrado a través de un celular por una de las personas que estuvo en el evento. Pero también se sumaron declaraciones de amigos de la víctima –algunos de la cuales también fueron agredidos– y otros testigos que presenciaron el brutal ataque.
De esas testimoniales surgió que existió un pacto previo entre los agresores para atacar a Pérez. Es decir se pusieron de acuerdo para esperar a la víctima a la salida y golpearlo en manada.
Por ese motivo la fiscal de Homicidios Claudia Ríos, al frente de la pesquisa, adelantó este miércoles durante una conferencia de prensa que, en caso de que los sospechosos sean detenidos, serán imputados por el delito de homicidio agravado por el concurso premeditado de dos o más personas en grado de tentativa.
A eso se le sumarían las lesiones leves contra dos amigos de la víctima, que intentaron defenderlo y también fueron golpeados. Con esa dura calificación, los autores arriesgarán una pena de entre 10 y 25 años de cárcel, en caso de que lleguen a juicio oral y público.
Pérez, quien trabaja como comerciante y es jugador de hándbol, fue agredido puñetazos, patadas y hasta le arrojaron piedras de grandes dimensiones cuando estaba inconsciente en el piso. Producto de la agresión resultó con una fractura del seno maxilar izquierdo, que le afectó parte del ojo de ese sector.